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Nacimiento y recorrido del Río Ubierna
El río Ubierna nace en el término municipal de Quintanilla Sobresierra, en el pago llamado la Cueva, donde surge el arroyo Quintanilla, bañando los pueblos de Quintanarrío, Robredo Sobresierra y Villalvilla Sobresierra. En este último lugar se le junta el Arroyo Jordán que desciende desde Hontomín. Continúa por Gredilla la Polera hasta el barrio de San Martín de Ubierna, donde se le une el Arroyo Rucios, procende de Castrillo de Rucios.
Tras recorrer las últimas estribaciones del sector Vascocantábrico y dejando a un lado la Sierra del Ubierna llega al valle del Ubierna, comenzando su recorrido por la depresión de la Cuenca del Duero. Es en el término de Ubierna, con su barrio de San Martín, donde recibe el mayor aporte de agua este río, de ahí su nombre, pues los manantiales, pozas y arroyos que lo alimentan impiden que se llegue a secar durante los meses de verano, siendo conocido por todos la pérdida de caudal de este río hasta el barrio de San Martín durante los años más secos. Es sabido por la fuentes clásicas que en estas tierras el clima era cálido y seco durante el verano, lo que confirmaría el nulo aporte de agua de los arroyos de latitudes superiores a la localidad de San Martín de Ubierna. El Río de las Espisas, que nunca se ha conocido seco, es el más fiable y durarero de sus afluentes, desembocando en el mismo pueblo de Ubierna tras cruzarse con el Arroyo del Castillo. De este pequeño río aún conocemos dos molinos que estuvieron en uso durante al menos 400 años.
Todo ello hace que el río tome su nombre del pueblo de Ubierna, pues aquí es donde nace el verdadero río y su caudal.
Su recorrido continúa por los términos de Quintanaortuño, Sotopalacios, Quintanilla Vivar, Sotragero, Villarmero, Quintanadueñas y Villagonzalo Arenas, y llega a desembocar en el Arlanzón en Villalonquéjar, cuatro kilómetros al poniente de Burgos, después de haber recorrido unos veinte desde su nacimiento.
Apariciones documentales
El río Ubierna se hizo famoso desde que fue citado en el "Cantar del Mío Cid" en el verso 3.379. Texto, Gramática y Vocabulario. Tomo 11, pág.781, edición de D. Ramón Menéndez Pidal, que en las Cortes de Toledo pone en boca de Asur los siguientes versos:
¡Ya varones, quien vido nunca tal mal!
¿Quién nos darie nuevas de miio Cid el de Bivar?
¡Fosse á rio d´Ovirna los molinos picar
E prender maquilas commo lo suele far! (1)
Que la Primera Crónica General prosifica así: <Váyase pora río d´ovirna a la heredad donde es natural et adobe sus molinos et su heredad, ca mester lo aura ayna>.
En una venta de tierras en el valle de S.Martín de Ubierna al abad de Cardeña, encontramos en el Becerro de Cardeña, fol. 19, col I, que menciona Berganza, I, 84, a 23-07-909, bajo el lema: <Terras in rivulo de Obirna> : <...vendemus tibi Jhoannes terras iusta rivulo de Obirna, alia parte agro de Sendolfo .....> (1)
Noticia mucho más moderna es la referida en una escritura de obligación, por la que varios vecinos de Ubierna se comprometían a hacer un río nuevo desde la Tabla de San Martín de Ubierna hasta Carrezapatero. Por el interés de diferentes propietarios de las tierras que se veían anegadas por dicho río, entre los que destacaban principalmente la Iglesia de San Lesmes, Andrés de Sarabia en su nombre, y el Conde de Salinas, Francisco Fernández de Jubera en su nombre, se vieron en necesidad de encauzarlo por en medio del Prado de Barajuecos, dando un plazo de construcción entre mediados de marzo y finales de mayo del año 1632. Parece ser que anteriormente el río llevaba un curso más superficial, poco profundo, y cercano al regañón, pues en un apeo de la iglesia de San Martín del año 1795 se menciona el "río viejo" en donde ahora desemboca el Arroyo Retuerto.
El lugar que ahora conocemos como el puente de San Martín no tuvo el aspecto que ahora todos conocemos. Antes de la desaparición del roquedo que estrechaba el paso por esta vía, pudo haber existido algún elemento que la cerrase por completo, de ahí que se nombrase esta zona como la Tabla, en referencia a que dicho elemento realizase un control de paso por el cañón, ya que la vía principal se encontraba sobre la ladera opuesta del encrestado izquierdo, y que hoy conocemos como Camino Montorio.
Bibliografía
- (1) Noticias históricas de Ubierna, de la Hermandad de Caballeros Hijosdalgos de Santa María de Montes Claros de la Junta de Río Ubierna y de la Merindad y Jurisdicción de Río Ubierna. Domingo Hergueta y Martín. 1937.
- Fotografías:
- Superior Izquierda: Cascada del Pozo del Diablo.
- Superior derecha: Río de las Espisas a su paso por el pueblo.
- Trabajo de recopilación: Héctor Hernando Arce.
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